Campo, Luis (Vicegobernador)

Martes 15 de abril de 2008

¡Campo, compadre...!

Leemos, con cierto desasosiego, que no tiene fundamentos habida cuenta lo que ya hemos expresado en dos textos anteriores (uno, dos), la pertinacia dirigencial para emplear, en la estructura del PJ, el término “compañero” para referirse a los miserables.

Sin rubores, según lo recoge Diario Textual, el presidente de la Cámara de diputados -que en un rapto de inusitada franqueza dejó de ser “Honorable” hace algunos años-, sostuvo que “El compañero que gane una interna, tiene el derecho a que el partido lo apoye (…) máxime cuando no está impedido de presentarse por una causa judicial. No queda ninguna duda de que el Partido Justicialista corresponde que lo respalde”.

Más adelante, el mismo Campo, en su calidad de vocero oficial y calificado, exhibió una elocuente muestra de la plasticidad ética del partido que no en vano tiene como presidente a un delator de las Tres A:

“No hay ningún invalidante, más allá de lo ético. Pero desde el partido, institucionalmente, no se puede medir esa ética. En todo caso lo puede medir el votante."

El presidente del segundo Poder de este sistema democrático ha formulado con extremada crudeza qué se puede esperar de este gobierno y al mismo tiempo ha desnudado la ineficacia de los sectores populares para depurar a la sociedad de sus elementos indeseables.

Campo, en diez líneas, nos regala para nuestra reflexión una conclusión didáctica: no bastan las marchas para desandar tanto camino.

VENCE NUMANCIA
El PJ ya está pensando en hacer trampa
El Consejo partidario del PJ se reunió hoy. Y ni bien terminado el encuentro, el responsable del contacto con el periodismo –el vicegobernador Luis Campo– confirmó que esa asociación partidaria está dispuesta a recurrir a la trampa para ganar las elecciones del próximo 31 de agosto.

Lo hizo en el mismo sentido que el presidente Carlos Aragonés, que exigió a los peronistas que busquen “parientes, amigos y proveedores” que tengan domicilio en Santa Rosa aunque residan en otras localidades. Aragonés dijo que había que encontrar “hasta en La Adela” gente que pudieran recolectar para que sufrague en Santa Rosa.
Campo tiene la misma idea. Con el agravante de que no es sólo un energúmeno con cargo partidario, sino el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia.
Campo aseveró este mediodía en la sede del PJ, ante la prensa: “el peronismo siempre se ha movilizado; no te quepa ninguna duda de que vamos a ir a buscar al compañero que esté hasta en la más chiquita de las localidades y tenga domicilio en Santa Rosa. Pero no es por este hecho puntual”.
–¿Usted sabe, entonces, que existen estas irregularidades?
–Eso no es una irregularidad…
–Si alguien tiene domicilio en una ciudad y vive en otra es por lo menos una radicación irregular…
–No, es lo tradicional, mirá…
–Por más tradicional que sea, es una irregularidad.
–Hay… esteee… compañeros que circunstancialmente viven en otra localidad… y si me preguntás porqué circunstancialmente no hacen el cambio de domicilio, no lo sé.
–Usted sabe que a partir de estas radicaciones irregulares ha habido escándalos en la provincia, porque incluso se ha torcido el resultado de algunas elecciones.
–Sí, sí. Pero no estamos hablando… se puede torcer una elección con 15 o 20 radicaciones… Seamos serios… somos 17 mil (afiliados) en Santa Rosa más unos 20 o 25 mil independientes… Es tan grande Santa Rosa… no es Loventué.
...no va quedar ninguno? Ahora es el vicegobernador Luis "Cacho" Campo el que renunció a su cargo en el consejo partidario. Sumó así un gesto al que ya hicieron Rubén Marín y Carlos Verna, entre otros. Entre los que huyó como una rata se incluye también el ex secretario de Gobierno de JCT, JPFasce.
¿Qué quiere decir todo esto, che? ¿Alguien alcanza a entender exactamente el fondo de la cuestión?
Campo dijo hace un par de semanas que apoyaría a Juan Carlos Tierno si le tocara ganar la interna por la intendencia. Esas declaraciones cayeron como el culo en el vernismo puro. A lo mejor hay que buscar los motivos por ese lado. Y en el flamante pacto al que habrían arribado vernistas y jorgistas, en las últimas horas y que incluyó la renuncia del subsecretario de Salud.
Además, usando una argumentación impresentable, coincidió con el ya impresentable presidente a cargo Carlos Aragonés en que había que reclutar vecinos en toda la provincia para que decidieran en la elección santarroseño.
Esto está divertido, la verdad. Y es un historia que promete nuevos y atractivos capítulos. Así que estén atentos, amigos...

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